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Iglesias del país se quedan sin hostias por falta de harina y gas

En Mérida se quedaron sin el sacramento de comunión

Iglesias del país se quedan sin hostias por falta de harina y gas

Este domingo, iglesias del estado Mérida no pudieron hacer el sacramento de comunión por falta hostias.

Últimamente las iglesias en el país se han visto afectadas por la crisis y escasez de alimentos.

Feligreses alegaron que los sacerdotes indicaron la irregularidad y compartieron trozos de pan, para así recibir la comunión.

Las iglesias no cuentan con la harina de trigo necesaria para la realización de hostias y ser repartidas entre los feligreses.

Iglesias del país se quedan sin hostias

Leonardo Rodríguez, periodista local, informó que las Iglesias de Mérida comienzan a no dar comunión ante la falta de hostias, producto de la escasez de harina de trigo.

El hecho se repite constantemente

El hecho se ha venido repitiendo desde hace varios meses. Sin embargo la situación ha agravado sin solucionarse.

En algunas oportunidades los creyentes colaboran con harina y gas pero estas ayudas no son suficientes.

Los sacerdotes han realizado labores para solventar la situación y junto a mojas tratan de fabricar hostias pero esperan que se normalice la distribución del material para realizar las mismas.

Iglesias de Venezuela se quedan sin hostias por falta de harina y gas

Desde el año 2013 la Iglesia Católica presenta la agravante

En el año 2013 la Iglesia Católica tuvo que abstenerse, en muchas ocasiones, a dar hostias y vino.

Giovanni Luisio Mass, encargado de la elaboración de las hostias por parte de la Orden de Los Pobres Caballeros de Cristo del Templo de Jerusalén, explicó que se agudizó la escasez de la harina de trigo sin leudante que sirve para fabricarlas. Esto ocurrió en el año 2015, en el estado Anzoátegui.

Disminución de fabricación de hostias

La producción mensual de hostias ha disminuido de 80.000 a 30.000. Esta caída ha afectado a todos los templos de tres estados venezolanos.

Solamente se pueden enviar 1500 hostias a las iglesias del norte del país, porque ya no tienen suficiente harina para fabricar las 8000 que solían mandar.