La ONG, Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), presentó su informe anual elaborada con seguimiento a los medios de comunicación, cifras de organismos oficiales, entrevistas a la ciudadanía, policías, trabajadores de salud y otras profesiones
Una infografía publicada informa que de 100.000 habitantes al menos 89 murieron de forma violenta en el 2017.
Venezuela se ubica en el segundo país más peligrosos del mundo, lista encabezada por El Salvador, país ubicado en el centro de América.
Según la OVV, durante este 2017 al menos 26.616 personas murieron de forma violenta, de ellos 16.046 fallecieron en homicidios registrados por la justicia, 5.335 en manos de cuerpos de seguridad y 5.035 perecieron violentamente sin que se abrieran expedientes judiciales.
Comparaciones con países vecinos
Colombia uno de los países que años anteriores lideraba la lista de las naciones más peligrosas registró un saldo de 23 víctimas por cada 100.000 habitantes, menor a comparación de Venezuela.
Para Brasil la estadística subió, pues de cada 100.000 habitantes 29 murieron de forma violenta. Mientras que México tuvo un amento a 16,9 muertes por cada 100.000 habitantes.
Víctimas y victimarios similares
Roberto Briceño León, director de la OVV dijo, el 60% de las víctimas y el 61% de los victimarios tienen entre 12 y 29 años. El 95% de las víctimas son hombres, y el 98% de los victimarios son también de sexo masculino.
Inmersos en una aguda crisis política, económica y social, la ONG atribuye las muertes al deterioro de la calidad de vida, el Estado de Derecho. Afirmó que el 64% de los delitos no son denunciados en Venezuela por falta de confianza en las autoridades.
Ministerio también detalló sus cifras
Néstor Reverol, ministro de Interior, Justicia y Paz, explicó que los crímenes denunciados se redujeron un 15,2% respecto a 2016. Cifras oficiales explican que el número de homicidios pasó de 16.976 a 14.389,
Briceño León refutó estas declaraciones, pues “Nos llama mucho la atención que la disminución que él establece para este año está fundamentalmente en los meses posteriores a la finalización de las protestas”.