El lugar quedó destrozado por completo
La casa donde murió el ex-inspector del Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Crimalísticas (CICPC) Óscar Pérez, junto a su equipo quedó hecha escombros.
Tras el operativo, supuestamente derrumbaron la edificación.
El motivo, no dejar rastros para no levantar sospechas.
Winston Flores, diputado de la Asamblea Nacional, está encargado del caso y difundió a través de su cuenta en twitter, fotos del lugar donde murió el ex-inspector.
“Así quedó la casa de la Masacre del Junquito, violando la ley de policías donde se debe resguardar el lugar de los hechos. Ya queda claro lo que querían esconder, la violación de derechos humanos”, escribió el diputado.
Operativo en contra de Óscar Pérez
Óscar Pérez se pronunció en el año 2017 en contra del mandato de Nicolás Maduro.
El pasado 15 de enero, funcionarios de cuerpos de seguridad emprendieron una búsqueda en el kilómetro 16 de El Junquito, para capturar al ex-inspector y su equipo.
Los funcionarios dispararon y lanzaron granadas al lugar donde se escondían, resultando fallecidos las nueves personas que estaban resguardadas.
El hecho fue denominado «La masacre de El Junquito».
Tras el paso de los días, aún quedan muchas interrogantes.
El acto ha conmocionado al país y a la comunidad internacional, pero el Gobierno ha tratado de dosificar las informaciones dadas sobre el tema.
La vivienda fue vista por el Gobierno como si se tratara de un fuerte militar.
Los cuerpos fueron llevados a la morgue de Bello Monte, donde algunos fueron entregados a sus familiares para que los enterraran inmediatamente sin sus consentimientos.
En cambio, el cadáver de Óscar Pérez fue entregado a los días a su tía y su prima, y enterrado a lo último del cementerio.
Medios de comunicación y ciudadanía no pudieron presenciar el entierro.
Óscar Pérez difundió vídeos por redes sociales
El ex-inspector difundió a través de sus redes sociales, vídeos donde se apreciaba la persecución de los funcionarios hacia su equipo.
Cada minuto aparecía un nuevo vídeo y el horror persistía.